En los últimos años, la uva Monastrell ha protagonizado una resurrección triunfal con la que ha pasado de la sombra al estrellato en el mundo de la producción de vinos. Este hecho nos alegra pues siempre hemos considerado que esta variedad de uva era un diamante en bruto, de ahí que sea la base de nuestros vinos DEMUERTE.
De la sombra al estrellato: La resurrección triunfal de la uva Monastrell
La uva Monastrell es una joya vinícola que yacía en el olvido y que ha emergido con fuerza, conquistando paladares y ganando reconocimiento internacional. Cultivada desde tiempos inmemorables en el Levante de la Península Ibérica, en Murcia y en el arco mediterráneo en general, la variedad Monastrell ha sido redescubierta y hoy se erige como una de las cepas más prestigiosas del mundo.
Un renacer después de tres décadas de olvido
A pesar de sus raíces históricas como ingrediente esencial de vinos en la cuenca mediterránea, hasta hace poco más de 20 años, la Monastrell pasaba desapercibida para todos. Todo esto cambió, sin embargo, en el momento en el que enólogos y bodegas dirigieron su atención a esta uva, desvelando su potencial oculto y rescatándola del anonimato en el que se encontraba. De ahí que, actualmente, podamos decir que esta uva está experimentando un renacer vinícola que ha captado la atención de expertos y aficionados por igual.
Un espectro de colores y sabores únicos
Los vinos elaborados con la uva Monastrell han conquistado el mercado con su elegancia moderna y sus colores purpuravinos. Son fruto del buen hacer de los enólogos, que han logrado extraer lo mejor de esta cepa, creando vinos con taninos suaves y con una frescura inigualable. Unos vinos que han sido acogidos de manera muy positiva y han hecho que podamos hablar de un renacimiento de esta variedad de uva.
Una resurrección que no solamente ha sido triunfal en España, sino que se ha extendido al resto del mundo. Y es que los vinos elaborados con Monastrell han sido aclamados a nivel internacional, donde cosechan premios y distinciones allá donde se dan a conocer.
DEMUERTE: La apoteosis de la Monastrell
En esta resurrección vinícola, la bodega que elabora los vinos DEMUERTE se erige como una líder indiscutible en el sector. Todos sus vinos llevan la firma distintiva de la uva Monastrell, lo que ha contribuido a consolidar su posición en la cima de la excelencia vinícola. Pablo Cortés, CEO de la bodega, comparte la historia que hay detrás de esta elección estratégica: “Desde el principio, buscamos la uva Monastrell para nuestros vinos. Encontramos los mejores viñedos en Yecla, Murcia, con cepas viejas que producían vinos extraordinarios, y ahí comenzó todo”.
La colección de éxitos de DEMUERTE
Con seis vinos que tienen a la Monastrell como protagonista indiscutible de su composición, los vinos DEMUERTE han conquistado paladares y competiciones internacionales, acumulando premios en todo el mundo. Por ello, Cortés destaca: “Cada uno de nuestros vinos cuenta una historia única, una historia que comenzó con el redescubrimiento de la Monastrell. El mercado ha respondido de manera excepcional, y estamos encantados de ver cómo nuestros vinos son aclamados en todo el mundo”.
El futuro brillante de la Monastrell
Este resurgimiento de la Monastrell no solo es una victoria para los vinos DEMUERTE, sino que se presenta también como un testimonio del potencial transformador que yace en la exploración de las raíces vinícolas. Y es que, con su perfil de sabor distintivo y su aceptación creciente en los mercados internacionales, la Monastrell está en camino de convertirse en una variedad icónica del mundo del vino, celebrando su renacer desde las sombras del olvido a la luz del estrellato vinícola.
